ES
Pilotos de calor residual
Cuando una zona calefactora alcanza una temperatura
superior a 60±15ºC se enciende el piloto de calor residual
correspondiente manteniéndose encendido, aunque el
mando esté en cero, mientras no baje la temperatura. Sin
embargo, siempre se deberá prestar especial atención a
la temperatura que tiene la zona de cocción puesto que
existe la posibilidad, afortunadamente remota, de que
el piloto se estropee y no indique la temperatura de la
mencionada zona.
Consejos para la buena utilización de
las placas VT
Para obtener el máximo rendimiento durante el cocinado
deben cumplirse los siguientes requisitos:
* Utilizar recipientes con fondo totalmente plano, pues
cuanto mayor sea la superficie de contacto entre el
cristal y el recipiente, mayor será la transmisión de
calorías. Observe en la figura 8 cómo en los recipientes
golpeados o cóncavos la superficie de contacto es
menor.
Bien
* Para evitar abolladuras en los fondos recomendamos
que éstos sean gruesos.
* No es recomendable utilizar recipientes cuyo diámetro
sea menor que el del dibujo de la zona calefactora.
* Centrar bien los recipientes sobre los dibujos que indican
la zona calefactora.
* Secar los fondos de los recipientes antes de colocarlos
sobre la encimera vitrocerámica.
* No dejar ningún objeto o utensilio de plástico o láminas
de aluminio sobre la encimera de vidrio.
* No deslizar los recipientes que tengan bordes o filos
que puedan rayar el vidrio.
* No utilizar la encimera vitrocerámica sin un recipiente
sobre la zona encendida.
* No cocinar con recipientes de plástico.
* El material de los recipientes debe ser resistente para
evitar que se funda sobre el vidrio.
* El vidrio soportará algunos golpes de recipientes
grandes y que no tengan aristas vivas. Deberá tenerse
precaución con los impactos de utensilios pequeños y
7
fig. 8
Mal
Mal
puntiagudos.
Tenga la precaución de que no caigan sobre el
vidrio azúcar o productos que lo contengan, ya que
en caliente pueden reaccionar con el vidrio y producir
alteraciones en su superficie.
Limpieza y conservación
Para la buena conservación de la encime ra vitrocerámica
se debe hacer la limpieza empleando productos y útiles
adecuados. La encimera de cocción vitrocerámica se debe
limpiar, cada vez que se utiliza, cuando esté tibia o fría de
esta forma la limpieza es más fácil y evita adherencias de
suciedad acumulada de diversos cocinados.
No emplee, en ningún caso, productos de limpieza agresi-
vos o que puedan rayar las superficies (en la tabla siguiente
le indicamos, entre algunos productos habituales, cuales se
deben emplear). Tampoco se deben utilizar, para la limpie-
za de la encimera, aparatos que funcionen mediante vapor.
MANTENIMIENTO DEL VIDRIO
En la limpieza se debe tener en cuenta el grado de
suciedad y utilizar en función de la misma los objetos y
productos apropiados.
Suciedad ligera
Suciedades ligeras no adheridas se pueden limpiar con
un paño húmedo y un detergente suave o agua jabonosa
templada.
Suciedad profunda
Las manchas o engrasamientos profundos se limpian con
un limpiador especial para vitrocerámicas siguiendo las
instrucciones del fabricante.
Suciedades adheridas fuertemente por requemados
podrán eliminarse utilizando una rasqueta con cuchilla
de afeitar.
Irisaciones de colores: Producidas por recipientes con
restos secos de grasas en el fondo o por presencia de
grasas entre el vidrio y el recipiente durante la cocción. Se
eliminan de la superficie del vidrio con estropajo de níquel
con agua o con un limpiador especial para vitrocerámicas.
Objetos de plástico, azúcar o alimentos con alto contenido
de azúcar fundidos sobre la encimera deberán eliminarse
inmediatamente en caliente mediante una rasqueta.
Cambios de color del vidrio.
No influyen en su funcionalidad y estabilidad y suelen pro-
ducirse por limpieza inadecuada o recipientes defectuosos.
Los brillos metálicos son causados por deslizamiento de
recipientes metálicos sobre el vidrio. Pueden eliminarse
limpiando de forma exhaustiva con un limpiador especial
para vitrocerámicas, aunque posiblemente necesite repetir