• Introduzca el tubo del conducto de humos adaptado en
el collar de la chimenea. Acóplelo y tire del tubo para
introducirlo en el tubo acodado del conducto de humos
(utilice el sello de cordón que se adjunta).
• Coloque la estufa de inserción en su posición final. Con
ayuda de un cemento de horno (o posiblemente sello de
cordón), el tubo acodado del conducto de humos se
coloca en la salida de humos de la estufa de inserción.
• El tubo del conducto de humos debe acoplarse a la salida
de humos del borde frontal con un tornillo autocortante
M6 A. Utilice un taladro de Ø5,5mm y practique un
orificio en el tubo del conducto de humos para el tornillo.
• Nota: Es importante que las uniones estén bien selladas.
Una cantidad de aire escasa o algo similar puede
perjudicar al funcionamiento de la estufa.
• La chimenea de acero de Jøtul puede acoplarse
directamente en la estufa de inserción con ayuda de un
anillo de transición (nº de catálogo: 101489). Si se
necesitan rejillas de deshollinamiento, debe utilizarse un
regulador de tiro.
Nota: Recuerde que la pieza del tubo del conducto de humos
que se introduce en la chimenea debe aislarse con lana de
roca.
Instrucciones de
funcionamiento
Encendido inicial y uso normal
• Abra todos los respiraderos.
• Encienda un fuego pequeño para empezar.
• Aumente el tamaño gradualmente y mantenga el fuego
ardiendo durante dos horas.
Aviso!
Productos pintados: Cuando se enciende un fuego por
primera vez, es normal que las estufas recién pintadas
emitan un gas irritante, que puede tener un fuerte olor e
incluso desprender humo. El gas no es tóxico, pero una
ventana o una puerta abierta cerca de la estufa
proporcionará ventilación adicional.
Consejos para encender un fuego de
uso diario
Coloque dos piezas de madera de tamaño medio a cada
lado de la cámara de combustión. Arrugue papel de
periódico y colóquelo entre la madera. Seguidamente,
coloque encima pequeñas astillas para encender fuego
entrecruzadas. Encienda el fuego y continúe añadiendo
madera seca partida hasta que se haya formado una base
sólida de brasas ardientes. Ahora pueden añadirse 3 o 4
trozos de madera de tamaño pequeño o mediano. Deje
arder este fuego durante un rato.
Una vez comprobado que la madera arde bien, asegúrese
de que se haya producido la combustión secundaria. Esto
puede verse en forma de llamas amarillas ardiendo delante
de la cámara de aire.
Cierre el respiradero de encendido y ajuste el control de
aire principal para definir el nivel de salida de calor y
mantener temperaturas de funcionamiento seguras.
Nota: Nunca utilice gasolina u otros líquidos similares para
reavivar el fuego.
Advertencia: Nunca sobrecaliente la estufa. Si cualquier
parte de la estufa o de la chimenea se pusiera
incandescente, se está produciendo un sobrecalentamiento
cuyo resultado podría ser un incendio en la casa o daños
graves tanto en la estufa como en la chimenea. Cierre
inmediatamente el control del aire si se observa esta
situación.
Nunca utilice los materiales siguientes como combustible:
-
Productos de desecho domésticos
-
Madera pintada o impregnada, que es muy tóxica
-
Tablones de madera laminada
-
Madera de deriva
-
Plásticos o cualquier otro tipo de desperdicios
Estos materiales, además de ser contaminantes, podrían
dañar el producto.
Mantenimiento
Limpieza del cristal
Ocasionalmente es necesario limpiar la ceniza acumulada
de la superficie interna del cristal. La cantidad de hollín que
puede depositarse en el cristal podría depender de la
cantidad local de tiro presente o de la regulación del control
del aire superior.
Un buen consejo: Para la limpieza general puede utilizarse
un rollo de papel de cocina, empaparlo con agua caliente e
introducirlo en las cenizas. Frote el cristal con el papel y
observará que la mayor parte del hollín desaparece. Limpie
el cristal con agua limpia y séquelo completamente antes
de encender la estufa. Si fuera necesario limpiar el cristal
más a fondo, recomendamos la utilización de un
limpiacristales.
Limpieza y eliminación del hollín
Al menos una vez al año debe efectuarse una inspección
de mantenimiento rutinaria. Un buen momento para
hacerlo es cuando se proceda a la limpieza de la chimenea
y del conector. Durante el uso de la estufa, puede
depositarse hollín en las paredes laterales. El hollín es muy
buen aislante y reducirá la producción de calor de la estufa.
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