algunos productos combinados, y en
particular los que contienen abrillantador,
poseen una eficacia óptima sólo cuando
se utilizan determinados programas;
la eficacia de los productos que dan
lugar a la no necesaria utilización de sal,
dependen de la dureza del agua de
alimentación del aparato. Verificar que la
dureza del agua se compensa con el
intervalo de funcionamiento indicado en
el paquete del detergente.
La utilización inadecuada de estos productos
podría llevar a:
formación de depositos calcáreos en el
aparato y vajilla;
una empeoramiento del grado de
secado y/o lavado.
Carga del abrillantador
Este aditivo se introduce automáticamente
en la última fase del aclarado y favorece un
rápido secado de la vajilla evitando que se
formen manchas o sedimentos opacos.
A la izquierda del recipiente detergente se
encuentra el del abrillantador (fig. A "3").
Para abrir la tapa, apretar en la zona para
tal fin y simultáneamente tirar la lengüeta
de apertura.
Utilizar siempre aditivos especiales para
lavavajillas automáticos.
Es posible controlar el nivel del abrillantador
por medio del visualizador óptico (C) situado
sobre el distribuidor.
Regulación del abrillantador de 1 a 6
El regulador (D) está situado bajo el tapón
y se puede manipular con una moneda.
Se aconseja la posición 4.
El contenido calcáreo del agua repercute
notablemente tanto en la formación de
incrustaciones como en el grado de secado.
Es muy importante regular la dosificación
del abrillantador para conseguir óptimos
resultados.
En caso de que la vajilla presente estrías al
finalizar el lavado, disminuir la dosis en una
posición. Si la vajilla presenta manchas o
rastros blanquecinos, aumentarla un poco.
En el caso en el que se verifiquen problemas
de lavado y/o secado, se aconseja que
continúe con productos tradicionales (sal,
abrillantador, detergente en polvo).
Volviendo a la utilización de sal de tipo
tradicional, seran necesarios algunos
ciclos de lavado antes de que el sistema
de descalcificación del agua vuelva a
funcionar de manera óptima.
IMPORTANTE
En el caso de reclamaciones que
puedan estar ligadas a la utilización
imprópia de estos productos, no serán
validas las prestaciones especificadas
en la garantia.
C
LLENO
VACIO
reflejo oscuro
reflejo claro
D
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LIMPIEZA DEL FILTRO
El sistema filtrante (fig A "4") está
constituido de:
Un contenedor central, que retiene las
particulas más gruesas de suciedad;
Una placa que filtra continuamente el
agua;
Un microfiltro situado debajo de la placa
que impide el paso de las partículas de
suciedad más pequeñas asegurando así
un alcarado perfecto.
Para lograr siempre los mejores
resultados hay que controlar la limpieza
de los filtros antes de cada lavado.
Para extraer el sistema filtrante basta
levantarlo estirando del mismo (fig. 1).
El contenedor central puede ser extraído
para facilitar las operaciones de limpieza
(fig. 2).
Extraer la placa (fig. 3) y lavarlo bajo
un
chorro
de
agua
ayudándose
eventualmente con un cepillo.
Con el microfiltro autolimpiante, la
manutención es mínimo y la revisión
del grupo de filtros puede realizarse
cada 15 días. No obstante se aconseja
controlar, después de cada lavado la
parte central para cerciorarse que no
quede atascada.
ATENCIÓN!
Una vez limpiados los filtros, debe
asegurarse que los mismos hayan
sido acoplados correctamente y que
la placa se encuentre perfectamente
colocada en el fondo del lavavajillas.
Tener la precaución de girar, en sentido
horario, el filtro en la rejilla superior
porque una inserción imprecisa del
grupo filtrante puede perjudicar el
correcto funcionamiento de la máquina.
IMPORTANTE
No usar el lavavajillas sin el filtro.
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