niños puedan quedar encerrados en el aparato mientras juegan (¡Peligro
de sofocación!) y se evita que puedan encontrarse en otras situaciones
peligrosas para su vida.
• Este aparato no está pensado para ser utilizado por personas (incluidos los
niños) con capacidades físicas, sensoriales o mentales reducidas, o que no
tengan experiencia y conocimiento, a menos que una persona responsa-
ble de su seguridad les supervise o les ofrezca instrucción en el uso del
aparato. Los niños deben ser supervisados para asegurarse de que no jue-
guen con el aparato.
En el servicio diario
• Los contenedores de gases inflamables o de líquidos, por efecto del frío
pueden perder su estanqueidad. ¡Peligro de explosiones! No guardar nun-
ca contenedores con sustancias inflamables, como por ejemplo aerosoles,
encendedores y cartuchos de abastecimiento, etc. en el frigorífico.
• Las botellas y las latas no se deben poner nunca en el congelador. Podrían
explotar tan pronto se congela su contenido, mientras que los líquidos
que contienen anhídrido carbónico (bebidas con gas) ¡pueden llegar a
estallar! No poner nunca en el congelador limonada, zumos de fruta, cer-
veza, vino, cava, etc. Hacen excepción: las bebidas superalcohólicas que se
pueden poner en el congelador.
• No tragarse los helados ni los cubitos de hielo recién sacados del conge-
lador. El helado o el hielo muy fríos se pueden congelar en contacto con
la lengua o los labios provocando heridas.
• No tocar los productos congelados con las manos mojadas. Las manos se
podrían congelar sobre el producto.
• No utilizar nunca pequeños electrodomésticos (por ej. máquinas eléctricas
para hacer helados, batidoras, etc.) dentro del frigorífico.
• Antes de efectuar las operaciones de limpieza es necesario apagar el apara-
to, desenchufar la clavija de la toma de red, o quitar el fusible.
• Desenchufar la clavija de la toma de red agarrándola siempre por el cuer-
po de la clavija y nunca tirando del cable.
En caso de inconvenientes
• Si en el aparato se produjera un inconveniente se ruega leer las instruc-
ciones bajo el epígrafe "Qué hacer si...". Si dichas instrucciones no basta-
ran hay que abstenerse de efectuar ulteriores operaciones de reparación.
• Los aparatos frigoríficos deben ser reparados exclusivamente por personal
especializado. Las reparaciones incorrectas pueden acarrear notables rie-
sgos. En caso de necesitar una reparación, se ruega dirigirse al propio pro-
veedor o a un centro de asistencia autorizado.
49